Meditando en la Parábola de la oveja perdida.
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▶️Escoge una de las parábolas sugeridas y cuéntanos: ¿Cuál es el tema central del texto escogido?
En esta oportunidad he escogido a:
Parábola de la oveja perdida: Lucas 15:3-10
«Entonces él les refirió esta parábola, diciendo: ¿Qué hombre de vosotros, teniendo cien ovejas, si pierde una de ellas, no deja las noventa y nueve en el desierto, y va tras la que se perdió, hasta encontrarla? Y cuando la encuentra, la pone sobre sus hombros gozoso; y al llegar a casa, reúne a sus amigos y vecinos, diciéndoles: Gozaos conmigo, porque he encontrado mi oveja que se había perdido. Os digo que así habrá más gozo en el cielo por un pecador que se arrepiente, que por noventa y nueve justos que no necesitan de arrepentimiento.»
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De la cual interpreto la idea principal, de la importancia que le da Dios a la vida de una persona que aun escapándose del redil y resistiéndose a los cuidados que nuestro padre celestial nos brinda, el siempre tiene su vista sobre sus hijos y tiene la disposición de hacernos volver al camino correcto y no le importa descuidar a 99 ovejas, sino que se dedica a rescatar a aquella oveja perdida.
Lee el texto y explícalo con tus propias palabras de lo que puedes interpretar, haciendo una sencilla exégesis de lo que comprendes.
En esta parábola podemos entender como trabaja Dios y me encanta esta referencia hacia un pastor, ya que para este sus ovejas son lo mas importante, pues así somos cada uno de sus hijos para Dios y cuando alguno se escapa del redil o se desvía del camino que Dios nos tiene preparado el no duda en ir tras la búsqueda o rescate de aquella oveja.
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Y no solo se encarga de buscarlo el tiempo que sea necesario, sino que cuando logra rescatarla nuevamente, esto es un gran motivo para alegrarse y festejar y compartir con sus amigos este gran logro. Bueno esto es lo mismo que sucede en el cielo cuando un pecador se arrepiente de sus pecados y decide vivir conforme a la voluntad de Dios, este es un gran motivo para que haya fiesta en los cielos.
▶️¿Con cual otra parábola de los evangelios la asocias o encuentras similitud en su mensaje?
Le encuentro mucha similitud a la Parábola de la oveja perdida con la Parábola del hijo pródigo (Lucas 15:11-32) en la cual se muestra la referencia hacia un padre que tenia dos hijos y uno de ellos decidió reclamar su herencia para irse de casa a vivir su vida a su manera y esto solo causo que derrochara su herencia y viviera malas experiencias, por lo que decidió volver a casa de su padre y este no dudo en abrazarlo, besarlo, recibirlo y sentir un gran gozo al ver de vuelta a su hijos, causando cierto celo en el otro hijo que se había mantenido honrando a su padre durante todo este tiempo.
▶️ ¿Cómo aplicarías ésta parábola escogida para meditar, en tu vida cotidiana?
Esta parábola la aplicaría en mi vida, recordándome que debo tener misericordia por las personas y sintiendo el mismo amor para dedicarme y poder hacer todo los esfuerzos que sean necesarios para lograr que alguna persona que no conoce a Dios pueda cambiar su camino y convertirse, esto sin duda, es algo que causaría fiesta en los cielos y le cambiaría por completo la vida a esta persona.
▶️ ¿Te gusta el género literario didáctico que el autor Jesús y el escritor Lucas emplean en el texto?
Como ya lo he compartido en ediciones anteriores me encanta este genero didáctico de las parábolas, ya que que nos facilita la comprensión de muchas enseñanzas y nos hace entender la esencia del mensaje de forma directa, clara y sencilla. Es por ello que utilizado de forma reiterada en la biblia y luego de leerlas y meditar en ellas estas quedan grabadas en nuestra memoria.
▶️ Invita a 3 amigos a leer lo que meditaste y anímalos a participar también.En esta ocasión quiero invitar a @lilita75, @nanidi y @fannyescobar para que si gustan, también se puedan sumar a participar de esta bonita dinámica.
El Buen Pastor que da su vida por las ovejas, es capaz de dejar las noventa y nueve que están sanas y a salvo para buscar la que está perdida. Cuan maravilloso es nuestro Dios que cuando nos escoge para salvación, él nos busca hasta encontrarnos, nos carga en su regazo, nos abraza, venda nuestras heridas, se alegra de tenernos de vuelta en el redil; su capacidad de perdón es inmutable e incomparable.
Muy buena referencia de correlación a la parábola del hijo Pródigo, el que se va en rebeldía y regresa derrotado, pero El Padre se alegra de verlo y lo recibe de vuelta con los privilegios de un hijo al que ama.
Gracias por unirte a esta iniciativa que nos invita a meditar en la Palabra de Dios que es Santa y nos alienta.
Bendiciones mi querida @maytte y te deseo una semana de victorias!
En el rebaño del señor siempre abra una oveja perdida, el rebaño de Dios en este siglo, mi Dios tiene mucho trabajo. Al parecer las 99 ovejas están perdidas y de cien solo una busca al pastor; es decir el hombre de hoy se ha perdido en las cosas del mundo, tanto que se alejo de aquel que con tanto amor lo creo, la maldad del maligno hace hoy lo que estamos viendo en el mundo, le dio otra a oportunidad al mandar a su propio hijo Jesucristo, aún así no confían en él. Dios 🙏 nos ama. Cres que el hombre hoy ama a Dio?. Suerte amiga, Dios te bendiga.
Saludos @maytte
Gracias por la Invitación, es un Excelente parábola!
Y la Dinámica de Meditando en Parábola, es muy bueno, porque cualquier Parábola que se escoja, siempre nos va a dejar una enseñanza de vida 🙏🙏🙏🙏
El buen pastor siempre arrea a sus ovejas hacia el lugar donde pueden pastar bajo su vigilancia, y cuando alguna de estas se desvía del camino, hace todo lo posible para que no se extravíe y regresé al rebaño junto con las demás, y a las que por cierto, no dejo de atender por causa de la oveja descarriada. Y cuando la oveja que yace aparte, retorna al rebaño, el pastor entra en gozo, porque mantiene a todas unidas, pastando, cumpliendo el objetivo dado en la madre naturaleza.
Así, muy similarmente ocurre en los humanos. Quien es buen guía espiritual, entrega todo de sí mismo y hace lo posible para que sus guiados espirituales permanezcan unidos en sus propósitos sin desviarse del camino; pero de llegar a ocurrir, no desaparta la mirada ni la atención, ni en quienes permanecen juntos, no en quienes se encuentran segregados. Al volver éstos(as) últimos, se llena de gozo y lo celebra en pleno.